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Tu corazón es un músculo, y como cualquier otro, necesita entrenamiento. Cuídalo hoy para que te siga acompañando con fuerza durante toda tu vida.
Imagina poder subir escaleras sin esfuerzo, correr detrás de tus nietos o moverte con agilidad sin dolores ni limitaciones. El cardio es una buena herramienta para lograrlo. Más allá de mejorar tu resistencia, mantener tu corazón en forma reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, hipertensión, diabetes y deterioro cognitivo. Un sistema cardiovascular eficiente es la base de una vida activa y funcional a cualquier edad.
Sin embargo, muchas personas evitan el cardio porque lo asocian con largas sesiones aburridas en la cinta de correr. La realidad es que no necesitas correr maratones para fortalecer tu corazón. Existen muchas formas de mejorar tu capacidad aeróbica sin caer en la monotonía: sprints cortos, entrenamiento en cuestas, juegos como el fútbol o el baloncesto, artes marciales, saltar la comba o incluso sesiones intensas de baile. Lo importante es moverte, aumentar tu ritmo cardíaco y hacerlo de manera constante.
Un cuerpo fuerte necesita un corazón fuerte que lo sostenga. Empieza hoy, desafía a tu cuerpo y regálate más años de vida con calidad. Tu yo del futuro te lo agradecerá.
Álvaro Medina |
